Testimonios
& Críticas

Le Nouveau Ballet de Monte-Carlo

 
 

Ópera de Monte-Carlo, Salle Garnier

   

En las palabras de Irène Lidova, (Dictionnaire du Ballet Moderne, Paris, 1957): “Beneficiándose del patronazgo del Principado de Mónaco, dos compañías intentaron, entre 1942 y 1947, a pesar de las terribles dificultades de la guerra, reanudar la gran tradición del Ballet Russe de Monte-Carlo fundado algunos años antes por René Blum. Esta última troupe, habiendo cesado toda actividad en Europa con la declaración de la segunda guerra mundial, había llegado a los Estados Unidos, estando bajo la dirección de Serge Denham y se había convertido progresivamente en una compañía americana. Hubo que esperar el comienzo de 1942 para que renaciera, gracias a los esfuerzos de Marcel Sablon, director del Teatro de Monte Carlo, una actividad coreográfica regular. Bautizada Nouveaux Ballets de Monte-Carlo, la troupe que él llegó a constituír estaba en buena parte formada por bailarines parisienses en el exilio, pero comprendía asimismo elementos reclutados localmente, especialmente en el estudio de Julie Sedova en Niza. (…) Interrumpida en abril 1944, la actividad coreográfica no debía ser retomada sino un año después, cuando el príncipe Luis II de Monaco invitó al empresario Eugène Grunberg a reconstituír allí una troupe. Esta tomó el nombre de Nouveau Ballet de Monte-Carlo. Además de las temporadas regulares que dio en Monaco, ella apareció también en Londres durante el verano 1946. Nombrado director artístico, Serge Lifar produjo varias obras importantes como “Dramma per musica”, “Chota Roustaveli”, “Salome”, “Noir et Blanc”, “Roméo et Juliette”. Entre los artistas, podía aplaudirse, junto a Yvette Chauvire y a Janine Charrat, a Renée Jeanmaire, Ludmilla Tcherina, Wladimir Skouratoff y Alexandre Kalioujny.”

Diseño de Jean Cocteau para la temporada
de los Ballets Russes de Diaguilew en 1911

Pierre Michaut (Le Ballet Contemporain, Paris, 1950) escribe: “En octubre de 1947, Paris recibe –¡por fin!– la visita del Ballet Russe de M. de Basil, cuya carrera se había desarrollado luego de la separación de W. de Basil y de René Blum en 1935, en Inglaterra, en los EE.UU., en América Latina…”

“(…) A la cabeza de la troupe se encontraban Roman Jasinsky y Vladimir Dokoudowsky, personas notables, John Taras, Nicolas Orloff y Geneviève Moulin, a quien no habíamos vuelto a ver desde su partida de Paris en 1938; M. de Basil había contratado a dos excelentes artistas parisienses: Renée Jeanmaire y Wladimir Skouratoff.

Coronel Wassily de Basil
(Foto: Gordon Anthony, 1937)


 
 

Léon Bakst, decorado para "Schéhérezade" (1910, acuarela).
Actualmente en el Museo de Arte Decorativo, Paris

 
Schéhérezade (1946)

Nos parece oportuno recordar, refiriéndonos a la representación de Schéhérezade en Londres en 1947, el comentario del crítico inglés John Percival en la que éste describió como la mejor actuación de Skouratoff en esa temporada: "Tan sólo su magnífica elevación podría haber vuelto memorable esta performance, pero su interpretación era aún más sorprendente. Carl van Vechten ha descripto a Nijinsky en este rol, con sus "dedos sutiles y sensuales" flotando en el aire cerca de la piel de Zobeide sin tocarla jamás; Skouratoff, creando exactamente este mismo efecto, daba una idea de la convicción apasionada que el papel debe haber ganado de su primer intérprete."

 
 

Chauviré como la princesa Daredjan
en Chota Roustaveli
(foto Gordon Anthony)

 
Chota Roustaveli (1946)

Royal Opera House, Covent Garden, Londres